NO SE PUEDE negar que conforme pasa el tiempo, se van necesitando actualizaciones en la legislación como en la estructura de muchos organismos, como en el caso del Instituto Nacional Electoral, pero todo tiene que hacerse mediante estrategias bien analizadas a fin de que toda reforma que se pretenda hacer, cuente con el aval de todos, tanto legisladores, como ciudadanos en general.
Y aunque los gobernador, en este caso, estén representados por los legisladores federales, en estos momentos, la propia ciudadanía ha tomado partido en relación a lo que se ha presentado como iniciativa de reforma electoral, desde la presidencia de la república, porque de golpe y porrazo, quieren modificar las funciones de instituciones que han estado funcionando bien, quizá no para el presidente de la república, que no parece estar contento con nada, puesto que si pierde es problema de sus opositores y de los organismo reguladores de las elecciones, como ha sucedido en anteriores ocasiones, pero cuando gana, como es el momento mismo que toma posesión de la presidencia de la república, no reconoce que fue precisamente a través del INE, donde se le garantizó plenamente su triunfo electoral.
Por lo que corresponde a Morena, y sus militantes, hacen y dicen lo que dicta el señor presidente, por lo que no es confiable su percepción de una reforma electoral necesaria en el país.
El presidente, ha entrado en controversia con los funcionarios del Instituto Nacional Electoral, pero no distingue esta cuestión, que son precisamente personas y no la institución, aunque fueran otros los actores políticos, el organismo actuaría conforme a sus propósitos y responsabilidades que tiene otorgadas constitucionalmente.
Modificar al INE, es una propuesta que difícilmente pasará por su aprobación legislativa, salvo que de nuevo vuelvan a presentarse circunstancias políticas y de interés personal de quien representa al pueblo en el congreso.
Se insiste, tal vez, una reforma sea necesaria, en algunos aspectos políticos, porque obedecerían a los tiempos políticos, pero no tendría que abarcar desmantelamiento total de la institución, solamente por un capricho personal, que mucho ha evidenciado su interés por controlarlo desde la cúpula del poder presidencial.
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¿Y EL INFORME GUBERNAMENTAL?
MUCHO HA CORRIDO la versión, entre la sociedad, de que el Gobernador del Estado, Cuitláhuac García Jiménez, está metido, sin duda, en un verdadero brete, en virtud de que su comparecencia, ya sea personal o mediante un mandadero político, ante el congreso del Estado, para entregar su cuarto informe de gobierno, constituye, en estos momentos, un verdadero reto para lograr convencer a los legisladores y pueblo en general, sobre el trabajo desarrollado en toda la entidad, a lo largo de estos cuatro años de gobierno, pero sobre todo, de administración.
Se han ejercido, esto es evidente, miles de millones de pesos que no corresponden a la obra que se haya realizado en Veracruz. No aguantaría, de verdad, una auditoría responsable y comprometida con la honestidad y fuera de toda consideración de posible corrupción.
Esto, quizá, sea lo que más preocupa al Gobernador, siempre y cuando tenga conciencia de lo que está pasando, porque puede suceder que ni siquiera tenga idea de lo que representa justificar tanto dinero gastado en cuatro años, sin que haya algo contundente en lo que se pueda apoyar.
El gobernador, no es político, tampoco administrador, que se sepa, por lo que podría estar desconociendo lo que en realidad sucede con el gasto de tanto dinero, pero que lo pondría en serias dificultades personales, si por alguna razón, Morena, llegara a perder las elecciones y no hubiera quién le pueda cubrir las espaldas en el futuro, porque hay que entender que el responsable de la administración es él y por lo tanto cualquier desvió económico o irregularidad administrativa, recaerá, directamente en su persona con todas las consecuencias que en otros casos, ya se conocen.
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EN XALAPA, UNA MEJOR IMAGEN.
EL BIENESTAR de las personas no tiene que ver, solamente, con las obras y los programas sociales, también se hace necesaria una mejor imagen urbana. Por esta razón, en Xalapa, la administración municipal, encabezada por el alcalde Ricardo Ahued Bardahuill, se prepara para ofrecer a la ciudadanía espacios donde pueda disfrutar de las próximas fechas decembrinas de navidad y año nuevo.
Apenas terminaron las festividades de Todos los Santos, y en el ayuntamiento ya se planea la iluminación y adornos que se colocarán en toda la ciudad, cerrando el año con la mejor imagen posible.
Se sabe qué dentro de los proyectos para estas próximas festividades, se prepara una iluminación especial para la fachada del palacio municipal, adornos o escenarios para la fotografía familiar, así como la ambientación de espacios públicos como la explanada Xallitic y los parques Benito Juárez, y Miguel Hidalgo, cerrando la administración anual con 270 obras, mejoras en parques y áreas de jardín, iluminación y ambientación navideña digna de esta capital veracruzana.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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