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| Reprimen en Argentina a seguidores de Nicolás Maduro. | ||||
| La represión fue brutal contra los manifestantes argentinos que estaban pacíficamente realizando un abrazo solidario a la sede diplomática, mientras que un grupo de venezolanos opositores, quienes habían intentado asaltar la sede diplomática durante la mañana del martes y regresaron al mismo lugar a la media tarde aplaudían el accionar policial. | ||||
| Miércoles 01 de Mayo de 2019 | ||||
| Por: La Jornada | ||||
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La represión fue brutal contra los manifestantes argentinos que estaban pacíficamente realizando un abrazo solidario a la sede diplomática, mientras que un grupo de venezolanos opositores, quienes habían intentado asaltar la sede diplomática durante la mañana del martes y regresaron al mismo lugar a la media tarde aplaudían el accionar policial. La imagen fue grabada por dos periodistas, como también la cacería policial de sus compañeros que intentaban alejarse, con el saldo de tres heridos, incluyendo a D´Agnese, integrante del Partido Comunista y 15 detenidos, a los que intentaban liberar los abogados. Fue evidente la carga contra los argentinos, ya que no intentaron dispersar al grupo agresor de venezolanos que festejaron hasta la noche el intento de golpe de Estado liderado por Juan Guaidó, el autoproclamado “presidente encargado” de Venezuela, a pesar de que ya había fracasado su asonada. La intencionalidad política fue tan evidente como los numerosos mensajes del gobierno de Mauricio Macri, incluyendo al mismo presidente, apoyando el golpe y felicitando por la “liberación” de ese país. “Fue un intento de fusilamiento. Le dispararon a la cabeza y a una distancia mínima”, denunció el abogado Pedro Dinani, de la Liga Argentina de Derechos Humanos y defensor de D´Agnese, quien esta tarde recibió la noticia de su liberación, aunque deberá continuar internado y posiblemente procesado como sus compañeros por supuesta "resistencia a la autoridad". La imagen de esta represión difundida por las redes sociales y los dos únicos medios que en Argentina pasan estas noticias así como las movilizaciones y marchas contra el gobierno de Macri, causaron fuerte impacto en diversos sectores, que ratificaron su participación en todas las jornadas de lucha. Movilizaciones del Día Internacional del Trabajo El contundente paro y la multitudinaria manifestación de este martes en Buenos Aires que culminó con un acto de protesta en la histórica Plaza de Mayo en rechazo a las políticas del gobierno de Macri y con demandas y exigencias ante la gravedad de la crisis que vive el país, fue continuado este miércoles mediante un plan de lucha que llevó a sindicatos como el de Camionero y su líder Hugo Moyano a instalar gigantescas ollas populares. En esta capital fueron 300, varias de éstas en las cercanías de Plaza de Mayo, hasta donde llegaron centenares de personas sin trabajo y familias que están viviendo en las calles céntricas de esta capital, pero también por trabajadores que “no llegan a fin de mes” y jubilados. La Confederación General del Trabajo (CGT) y gremios como el del transporte, trenes y buses decidieron un curioso paro en este 1 de mayo, Día de los Trabajadores, mientras se advertía que varias corrientes internas de esta organización y 70 regionales en el país habían participado ayer del otro paro y la marcha con severas críticas a los dirigentes de esta organización por intentar dividir al movimiento obrero. Moyano destacó que el objetivo de las ollas populares es ayudar a la población más carenciada en el Día del Trabajador en un país donde están funcionando unos 35 mil comedores populares que asisten a los miles de desocupados e indigentes. Se trata de dar algo de comida a gente que pasa necesidades extremas, dijo el líder de Camioneros, quien manifestó su esperanza de que haya una mejoría en forma urgente porque la población está sufriendo mucho y llega el invierno. También respondió a las críticas del gobierno por el paro y la movilización de ayer que “por más que lo quieran disfrazar pintando leyendas contra esta medida de protesta no pueden ignorar lo que está sucediendo". Atribuyó las agresivas leyendas pintadas contra el movimiento obrero a "personal de inteligencia " del gobierno, y enfrentó a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien anunció que los organizadores de la protesta deberán pagar unos 23 millones de pesos, que es lo que costó el operativo de fuerzas de seguridad para controlar cualquier incidente. “Que lo pague ella, que hace 20 años que viene cobrando del Estado y, como la señora (diputada) Elisa Carrió, no hicieron nada por el país. Todos nosotros les pagamos los sueldos. Que paguen la multa con los sueldos que vienen ganando”, dijo Moyano, quien ironizó sobre la amenaza de cobrar a los gremios los costos de la seguridad durante la huelga. Bullrich alegó que había desplegado más de seis mil agentes, pero en realidad los escasos incidentes fueron protagonizados por grupos de encapuchados, que los gremialistas señalaron como “provocadores” del propio ministerio de seguridad. |
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