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XALAPA.- Haciendo gala de su frivolidad, irresponsabilidad y falta de empatía hacia los veracruzanos del norte del estado hoy en desgracia, el ex gobernador de Morena Cuitláhuac García Jiménez – el peor gobernador de la historia de Veracruz - y actual director de Cenagas, se da tiempo para presumir en redes sociales sus fotos con el futbolista Luis Roberto Alves Zague; de cuando juega futbol con sus contlapaches; o incluso de cuando compra jugos de naranja afuera de su oficina, pero no ha sido capaz de enviar un solo mensaje de aliento a los damnificados del norte del estado. Desde su último día de gobierno, el pasado 30 de noviembre de 2024 – pues no hay mal que dure cien años - García Jiménez no ha hecho alusión alguna a Veracruz, ni siquiera en medio de una de las mayores inundaciones de su historia que ha dejado decenas de muertos y varios miles de damnificados. Menos, ha dicho ni una palabra del grave señalamiento de la gobernadora Rocío Nahle por malgastar 750 millones de pesos en seguros contra desastres que fueron un fraude pues no fueron redituables a Veracruz. Eso sí, el oriundo de la colonia Progreso del cerro del Macuiltépetl –quien ha sido calificado por el diputado Esteban Bautista, también de Morena, como un lastre para su partido en Veracruz - comparte casi todas las publicaciones de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo o de la Secretaría de Energía, sus patronas al frente de Cenagas. La indolencia de Cuitláhuac hacia el pueblo que alguna vez mal gobernó – a pesar de que el expresidente Andrés López cada que venía a Veracruz decía en son de burla que era una bendición - se nota en sus redes sociales, pues si ha regresado a Veracruz, pero sólo de paseo a las dunas de Úrsulo Galván, y para ello si ha tenido tiempo de presumirlo en sus redes. Pero el exgobernador de Morena no solo guarda silencio ante la desgracia de los huastecos, sino también ante las múltiples acusaciones en su contra, tanto de la Auditoría Superior de la Federación como de Guacamaya Leaks, donde lo señalan de haber permitido a grupos criminales operar en el Estado, por lo cual habría recibido pagos millonarios en efectivo. El morenista también ha callado sobre las obras mal hechas, inconclusas o ineficientes que hizo durante su administración y que desde hace meses son señaladas. La emoción que refleja al postear en sus redes sus fotos con Zaguiño, o sobre los partidos de futbol que tiene con sus amigos, es lo opuesto a la que ha mostrado para opinar sobre los señalamientos de corrupción y presuntos desvíos de recursos registrados y documentados por el Órgano de Fiscalización Superior y recientemente por la Auditoría Superior de la Federación.
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