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XALAPA.- Análisis de pobreza multidimensional recientes demuestran que gracias a la política social implementada en México han reducido significativamente las carencias en el país, pero también revelan que la desigualdad persiste y quienes viven en pobreza extrema son los más perjudicados, pues enfrentan más carencias que hace 6 años. La política social actual en México tiene el objetivo de reducir la desigualdad a través de una amplia gama de iniciativas y programas con los que se entregan apoyos económicos a la población, estos benefician a los adultos mayores, personas con discapacidad, a madres de familia, jóvenes, becas para estudiantes y más. Recientemente el INEGI publicó los resultados del análisis de pobreza multidimensional del 2024 —que hacía el Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (CONEVAL)— mostrando un descenso significativo del 36.3 por ciento a 29.6 por ciento de personas en pobreza, es decir pasó de 46.8 millones a 38.5 millones de personas en esta condición. La pobreza extrema también disminuyó pasó del 7.1 por ciento de la población al 5.3 por ciento, lo que representa que existen 7 millones de personas en ese sector. De acuerdo con resultados anteriores, se trata del nivel más bajo desde 2016. Esta medición, es la primera realizada por el INEGI tras la desaparición del CONEVAL, sí confirma una reducción en carencias sociales, pero también revela persistentes desigualdades territoriales, por lo que la diputada Liz Salgado, del grupo parlamentario del PAN en el Congreso capitalino, hizo un llamado a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, a reorientar la política social hacia sectores con mayores rezagos. La legisladora comentó que se observa una disminución de 13.8 millones de personas, que corresponden a las que salieron de la condición de pobreza, destacó que es “un resultado importante, sin lugar a dudas”. Sin embargo, revisando el reporte a detalle, hay al menos, cinco resultados que es necesario resaltar, ya que el resultado es por el incremento en ingresos vinculados al salario mínimo. Pero beneficia más a quienes viven en pobreza moderada que a quienes viven en pobreza extrema.
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