|
Foto:
.
|
XALAPA.- Construida en los años de auge petrolero, la colonia Petrolera, que durante décadas fue una de las zonas residenciales más exclusivas de Coatzacoalcos, enfrenta hoy una realidad opuesta a la que le dio prestigio, pues se ha convertido en blanco de la delincuencia organizada. La colonia se distinguió por sus amplias casas, calles arboladas y su cercanía con la zona centro y el malecón costero. En ese entonces, fue el lugar de residencia de trabajadores de alto rango de Petróleos Mexicanos, profesionistas y empresarios y su ubicación estratégica y la calidad de sus viviendas la convirtieron en sinónimo de plusvalía y estatus social. Actualmente, esa postal contrasta con los constantes operativos policiacos que se han desplegado en las últimas semanas, al igual que en colonias como Puerto Esmeralda, Teresa Morales, Las Gaviotas y Benito Juárez Norte y Sur, consideradas en algún momento por el Observatorio Ciudadano de Coatzacoalcos como foco rojo. A ello se suman denuncias por robos a viviendas y ataques con armas de fuego contra las fachadas de algunos negocios que se aferran a darle vida a este sector. En ese clima de inseguridad, autoridades federales y estatales han asegurado varias casas en la colonia tras localizar en su interior vehículos con reporte de robo, presuntamente utilizados por grupos delictivos. Durante uno de los cateos recientes fueron detenidas al menos dos personas, lo que confirmó las sospechas de que algunos inmuebles rentados han sido convertidos en bodegas o “casas de seguridad”. Quince días después, otro operativo volvió a colocar a la colonia Petrolera en la mira, luego de que policías catearan una vivienda donde fue hallado un vehículo tipo Razer, utilizado en actividades recreativas de off road, que contaba con reporte de robo. Vecinos señalan que la transformación de la colonia comenzó con el abandono de propiedades, la falta de mantenimiento y la llegada de inquilinos desconocidos. Hoy, el paisaje urbano muestra viviendas cerradas, poca convivencia vecinal y un creciente temor a que más inmuebles sean utilizados con fines ilícitos. Aunque se han reforzado los patrullajes en la zona, los habitantes consideran insuficientes las acciones y piden una estrategia integral que permita frenar la violencia, recuperar la tranquilidad y restituir el valor social e inmobiliario de la colonia. No obstante, a pesar de los recorridos aleatorios de la Policía Municipal, en la Petrolera no han cesado los hechos de alto impacto, lo que mantiene la percepción de inseguridad entre quienes aún habitan en este sector.
|