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Xalapa, Ver.- Integrantes del grupo del regional mexicano Los Alegres del Barranco, reconocido por realizar un homenaje en sus conciertos a Nemesio Oseguera Cervantes El Mencho, aseguran que no son delincuentes, sino músicos. Cabe recordar que se encuentran en el ojo del huracán desde que cantaron su corrido El Dueño del Palenque y proyectaron el rostro del líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) durante un concierto en el Auditorio Telmex, propiedad de la Universidad de Guadalajara (UdeG), posteriormente el gobierno de México los acusó de apología del delito por exaltar a grupos criminales y abrió una investigación. Mientras tanto, las autoridades de Estados Unidos les retiró las visas tanto a ellos como a sus familias. Sin embargo, ellos se consideran contadores de historias y niegan que sus corridos exalten al crimen organizado y a sus líderes. Afirman que, para escribir sus corridos, se inspiran en las crónicas de periodistas que narran y documentan hechos relacionados con el narcotráfico en todo el país. José Pável Moreno, segunda voz del grupo, justifica: “Es lo que pasa en las noticias; son las mismas noticias que ustedes dan como periodistas. Nosotros también, pero solamente llevamos la nota con música”. Los músicos negaron que sus canciones incentiven la violencia. “Si nosotros supiéramos que nuestra música es la raíz de la violencia o los problemas, inmediatamente seríamos los primeros en poner el ejemplo de no contar nada, nada. Pero sabemos que esa no es la solución”, reiteró Moreno. Además, los Alegres del Barranco niegan conocer a algún líder criminal. Los Alegres del Barranco se defienden tras ser acusados de apología del delito; señalan que sus canciones no promueven la violencia y niegan tener algún vínculo con el crimen organizado. Los Alegres del Barranco nacieron hace 20 años en Sinaloa. Comenzaron tocando canciones románticas, cumbias, huapangos y corridos; este último género fue el que los catapultó a la fama. Los Alegres del Barranco fueron vinculados a proceso por presunta apología del delito luego de proyectar imágenes de capos del narcotráfico durante sus presentaciones.
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