XALAPA.- Recientemente, la ministra Norma Lucía Piña Hernández, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ha sido objeto de crítica por el oficialismo morenista por sus presuntas reuniones con líderes de la oposición y críticos del presidente Andrés Manuel López Obrador, según fuentes del Poder Judicial de la Federación (PJF). Las reuniones, confirmadas por diversas fuentes, incluyeron la presencia de magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), el líder del PRI, Alejandro Moreno, el expresidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, entre otros. Estos encuentros, presuntamente organizados en residencias particulares, han levantado suspicacias sobre el papel de la ministra en asuntos políticos, especialmente en un contexto electoral. Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, ha exigido que Piña se mantenga al margen del proceso electoral, denunciando su supuesto favoritismo hacia la oposición, mientras evidencia una falta de imparcialidad y una injerencia indebida en asuntos electorales. Eso sí, no se quejó cuando trascendió que Arturo Zaldívar, cuando era ministro de la Corte, operaba y extorsionaba jueces para que emitieran sentencias favorables a la 4T. La hipocresía de los morenistas no conoce parangón.
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