XALAPA.- Diez extrabajadores de la 64 Legislatura del Congreso del Estado de Veracruz han interpuesto una denuncia ante el Tribunal de Conciliación y Arbitraje (TCA), exigiendo su restitución tras ser despedidos de manera injustificada. A pesar de haber ganado un laudo que ordena su reinstalación y el pago de salarios caídos desde 2017, el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Juan Javier Gómez Cazarín, se ha negado a acatarlo. Como de costumbre, el advenedizo legislador morenista incurre en desacato, ¿cuántas van? Hay que recordar que la reunión entre los representantes del Congreso de Veracruz y el TCA está programada para el próximo 16 de mayo, con el objetivo de buscar un acuerdo que permita la reinstalación de los extrabajadores sin necesidad de recurrir a instancias adicionales. En ese sentido, el abogado de los trabajadores, Juan José Llanes Gil Del Ángel, ha instado al Congreso a acatar la decisión del tribunal y a compensar adecuadamente a los trabajadores afectados. Advierte que, de no hacerlo, podrían enfrentar consecuencias legales. Aunque a los morenistas les da igual; se sienten impunes y que el poder va a ser eterno. Por si fuera poca cosa, los extrabajadores también han denunciado haber sufrido "atropellos y violencia" por parte del Congreso desde que ganaron el laudo. Se estima que alrededor de 110 trabajadores fueron despedidos de forma irregular durante la LXIV Legislatura, bajo la presidencia de la Jucopo de Sergio Hernández. En la actualidad, sólo diez de ellos están exigiendo su reinstalación y compensación. El presidente de la Jucopo actual ha declarado que el Congreso no cuenta con los recursos suficientes para pagar los salarios adeudados, responsabilizando a su predecesor, Sergio Hernández, por las decisiones tomadas en contra de los extrabajadores. O sea, se lava las manos para tratar de ganar tiempo y heredarle el problema a la siguiente legislatura porque sabe que él ya no va a volver. La injusticia social como marca de la casa de este (des)gobierno morenista.
|
