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XALAPA.- El reciente asesinato del reportero y productor de contenido Roberto Carlos Figueroa Bustos en Morelos ha provocado una indignación generalizada entre periodistas y organizaciones internacionales de derechos humanos como Artículo 19 y la relatoría especial de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). El trágico suceso se desencadenó cuando Figueroa Bustos fue secuestrado en la mañana del viernes, luego de llevar a sus hijos a la escuela. A lo largo del día, la familia del periodista recibió llamadas exigiendo un rescate por su liberación. Por la tarde, el cuerpo de Figueroa Bustos fue descubierto junto al de otra persona dentro de su automóvil en el poblado de Coajomulco, municipio de Huitzilac. En respuesta a este acto de violencia, periodistas de Morelos han firmado una carta condenando el asesinato y denunciando la creciente violencia e ingobernabilidad en el estado. En el comunicado, se destaca que "todos los días contamos víctimas y los tres poderes de la entidad no asumen su responsabilidad". Las organizaciones internacionales, incluyendo Artículo 19, ONEA México y la relatoría especial de la CIDH, han expresado su preocupación por el crimen y han exigido una investigación exhaustiva para identificar y llevar ante la justicia a los responsables. El asesinato de Figueroa Bustos se suma a una lista preocupante de periodistas muertos en México. Según Reporteros sin Fronteras, durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador han sido asesinados al menos 37 comunicadores. Este alarmante panorama refleja la peligrosa situación en la que trabajan los periodistas mexicanos, con amenazas constantes, intimidaciones y ahora, asesinatos. Con este último crimen, México continúa siendo uno de los países más peligrosos para la prensa. Desde 1995, al menos 156 periodistas han sido asesinados en el país, principalmente por investigar temas relacionados con el crimen organizado, la inseguridad y el narcotráfico. El caso de Figueroa Bustos se suma a una triste lista de periodistas asesinados en México en los últimos meses, incluidos Ismael Villagómez, Jesús Gutiérrez, Nelson Matus Peña, Luis Martín Sánchez y Marco Aurelio Ramírez. Estos crímenes ponen de manifiesto la urgente necesidad de proteger la libertad de prensa y garantizar la seguridad de los periodistas en el país.
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