|
|
Foto:
..
|
XALAPA.- Aunque recientemente la Fiscalía General del Estado (FGE) presumió una reducción del 34 por ciento en la incidencia del delito de feminicidio, lo cierto es que los casos, lejos de disminuir, han ido en aumento. Prueba de ello es que Veracruz se ha convertido en uno de los estados más peligrosos del país para las mujeres, al sumar en los últimos cinco años más de 650 feminicidios, cifra que lo coloca en el segundo lugar a nivel nacional en este delito. Y por si esto fuera poco, aun con el alto índice de feminicidios, en Veracruz la mayoría de los casos permanecen en la impunidad, pues de las 548 carpetas de investigación que se iniciaron de 2015 a 2021, únicamente en 43, es decir, el 8 por ciento, se obtuvo una sentencia condenatoria. Con base en datos del Observatorio Universitario de Violencias contra las Mujeres de la Universidad Veracruzana (OUVMujeres-UV), aunque el número de feminicidios en la entidad ha pasado de 176 en 2017 a 129 en 2018 y 151 en 2019, no se ha reflejado una disminución significativa en la incidencia de este delito. Y es que tan solo en el primer trimestre de 2022, en la entidad hubo un registro de 28 posibles feminicidios. Esta cifra de solo tres meses representa una tercera parte de los casos documentados en todo el 2021, cuando se contabilizó un total de 83 feminicidios, y más de la cuarta parte de los casos registrados en 2020, cuando hubo 95 víctimas de este delito. El Observatorio subrayó que lo que más llama la atención son las víctimas de cada vez menos edad, pues de los 28 casos registrados del 1 de enero al 31 de marzo de 2022, seis son menores cuyas edades oscilan entre los 9 y los 17 años. En ese tenor, cifras oficiales del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp) revelaron que durante el primer trimestre del año en México se registraron 229 feminicidios. El Estado de México encabeza la lista de estados con más víctimas, al documentar 39 casos, en tanto Nuevo León y Veracruz comparten el segundo lugar en materia de feminicidios, con 21 casos cada uno (siete menos que lo registrado por el OUVMujeres-UV). Le siguen la Ciudad de México, con 15 casos; Oaxaca con 14 y en quinto lugar Chihuahua y Jalisco, con 10 víctimas cada uno. Los recientes casos de feminicidios, como el de Debanhi Escobar en Nuevo León y el de Juana Ovando, en Xalapa, han ocasionado que grupos feministas exijan al Gobierno federal la implementación de una alerta de género a nivel nacional. Uno de estos grupos es la Red Rebeldes con Causa, cuyas integrantes resaltaron que, tras casi tres décadas de la trágica oleada de feminicidios en Ciudad Juárez, tanto la inseguridad como la incapacidad de las autoridades se han expandido por todo el territorio mexicano. Las activistas señalaron que la cifra oficial de feminicidios no ha dejado de crecer desde 2015, con 412 presuntos casos ese año y cinco años después, la cifra se había duplicado con 948. En ese sentido, Estela Casados González, coordinadora del OUVMujeres-UV, señaló que esta idea de la emisión de una alerta de género no suena descabellada. "Llama la atención los números, porque desde el 23 de noviembre de 2016 tenemos una declaratoria de alerta por violencia de género contra las mujeres en el estado de Veracruz, por el delito de feminicidio", sostuvo. Recordó que en la entidad también se tiene otra alerta por agravio comparado, declarada el 13 de diciembre de 2017, y ya se analiza una tercera alerta por desaparición, dados los números de mujeres desaparecidas en fechas recientes. Sin embargo, Casados González resaltó que ninguna de estas alertas se ha seguido del todo, pues no hay una acción coordinada por parte de las autoridades, tal como lo mandata la declaratoria. "Al mismo tiempo, el Gobierno federal no ha dado un presupuesto importante que permita abatir el problema”, destacó, por lo que difícilmente nuevas estrategias van a tener resultado si las que ya hay no se están acatando de debida forma. La investigadora precisó que debe haber una responsabilidad por parte de las autoridades, pero también de la sociedad, pues es ésta la que muchas veces pone sobre los hombros de las mujeres la responsabilidad de la defensa de sus derechos y de la salvaguarda de su vida. "Algo que debemos tener muy claro es que el estado mexicano y, concretamente, las autoridades del estado de Veracruz deben de garantizar el respeto a nuestros derechos y el respeto a nuestra vida y generar aquellas condiciones que permitan prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer, pero la sociedad también debe hacer lo propio”, aseguró. Dijo que en muchas instancias se desacredita el testimonio de las mujeres, se duda de su palabra e incluso cuando se ha comprobado la agresión o las mujeres han perdido la vida, hay una serie de afirmaciones donde se culpabiliza a las mujeres porque se relacionaron con un hombre violento, tenían cierta vestimenta, transitaban en la calle a determinada hora, cuestionó. Estela Casados recordó que el mismo Gobierno federal ha reconocido que Veracruz es un estado de violencia hacia las mujeres y advirtió que, de declararse la tercera alerta por violencia de género, se convertiría en la única entidad de la República Mexicana con tres alertas, "lo cual sería un hecho bastante lastimoso". De acuerdo con el OUVMujeres-UV, los municipios con mayor número de casos de feminicidio son Acultzingo y Ciudad Isla, con tres cada uno, seguidos del puerto de Veracruz, con dos casos, mientras que Nanchital, Medellín, Coatzintla, Uxpanapa, Martínez de la Torre, Ángel R. Cabada, Coatzacoalcos, Minatitlán, Teocelo, Cazones de Herrera, Otatitlán, Xalapa, Tlalnelhuayocan, Cosamaloapan, Amatlán de los Reyes, Chinameca, Tierra Blanca, Acayucan y Córdoba presentan un caso cada uno. Así las cosas.
|
