Morena y aliados aprueban nueva Ley de Telecomunicaciones de Sheinbaum; Murió la libertad, dice la oposición
MEMORANDUM 3.-
Culmina la desaparición del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), luego de que la Cámara de Diputados aprobó en lo general la nueva Ley en Materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión, mediante la cual se crea una Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT) que regulará el sector, y contará con un órgano desconcentrado encargado de autorizar las concesiones; “Murió la libertad”, reclama oposición. Tras un debate de casi tres horas, los legisladores avalaron la nueva norma –que abroga la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, de 2014--, por 369 votos en favor de Morena y sus aliados, a los cuales se sumó la mayoría de la bancada de MC; 113 en contra de PAN y PRI, y tres abstenciones del partido naranja, que se dividió y adelantó que en lo particular se manifestará en contra del proyecto, como suele hacer. Al presentar la minuta del Senado, a la cual se le dispensaron trámites, y por lo tanto no pasó por comisiones, el bloque mayoritario en San Lázaro destacó que el órgano desconcentrado de la ATDT será la Comisión Reguladora de Telecomunicaciones (CRT), que sustituirá al extinto Instituto Federal de Telecomunicaciones y se conformará por cinco integrantes, nombrados por la jefa del Ejecutivo, pero ratificados por los senadores. De igual forma, resaltaron que reconoce derechos de los usuarios, con la obligatoriedad de que los medios nombren defensorías de las audiencias, pero al mismo tiempo permite la intervención de las comunicaciones de los usuarios, así como su geolocalización, pero únicamente con un mandato judicial, fundado y motivado. Por su parte, Claudia Leticia Garfias (Morena) resaltó que la iniciativa crea una CRT “con independencia técnica, operativa y de gestión”, mientras que la Comisión Nacional Antimonopolio, órgano desconcentrado de la Secretaría de Economía, se encargará de observar la preponderancia y regulación asimétrica. Asimismo, celebró que el Estado “continuará prestando el servicio de internet a la población, pero se respetará la concesión comercial para servicios a usuarios finales para competir en igualdad de condiciones que los privados”, además de que se crean mecanismos para distinguir entre información, noticias y opinión en espacios y programas mediáticos. Por el contrario, diputados del PRI y PAN insistieron en advertir que las atribuciones de la ATDT permitirán el surgimiento de un “Estado fisgón, policiaco y espía”, que podría monitorear en tiempo real todos los movimientos de los ciudadanos, sin necesidad de una orden judicial que lo autorice. Al subir a tribuna para fijar la posición de su partido, acompañado de sus correligionarios, quienes mostraban pancartas alusivas a la “censura” y el “espionaje” que supuestamente permitirá la nueva ley, el priista Erubiel Alonso acusó a Morena y sus aliados de pretender consolidar un “régimen de control, vigilancia y censura”, con lo cual “dan un paso más hacia la instauración de un Estado autoritario”. Mientras otros legisladores del tricolor colocaban al pie de la tribuna un ataúd blanco con la leyenda “Murió la libertad”, así como una corona fúnebre con la misma frase, Alonso Que aseguró que “las redes sociales dejarán de ser un espacio de libertad, ya no serán de los ciudadanos, sino del gobierno”, el cual “podrá controlar lo que se dice, lo que se comparte, lo que se critica. El contenido ya no será fruto de la creatividad de las y los ciudadanos, sino de la autorización del gobierno”. En medio de gritos de rechazo de Morena, PT y PVEM, recalcó: “Con esta ley nace un Big Brother (en alusión al libro 1984 de George Orwell) a la mexicana, un ente vigilante entrometido, autoritario, que todo lo ve y todo lo escucha, y no para proteger, sino para intimidar y someter a sus opositores. México está de luto. Con esta ley, se muere nuestra democracia, se criminaliza la libertad, se entierra la privacidad, se empodera la censura”. De su lado, el panista Miguel Ángel Monraz enfatizó que la nueva norma es “una amenaza y una censura a los ciudadanos. Si tú te atreves a criticar a este gobierno de Moren te van a vigilar en tiempo real y también te podrían sancionar. Es una amenaza a los concesionarios, los medios de comunicación, los periodistas, los permisionarios: o te alineas al poder o te van a sancionar o puedes perder tu concesión”. Tras su aprobación en lo general, dio inicio la discusión de la minuta en lo particular, donde se registraron 77 oradores para exponer 277 reservas.