Conagua devuelve a Pemex la torre en el puerto de Veracruz; no fue ocupada ni rehabilitada, como era la promesa de AMLO. | ||||||
Pablo Robles Barajas, director general de la región Cuenca-Golfo-Centro de la Conagua, informó que el proceso de devolución comenzó hace un mes, debido a que el edificio no fue ocupado. | ||||||
Sábado 13 de Septiembre de 2025 | ||||||
Por: REDACCION GOBERNANTES | ||||||
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La Comisión Nacional del Agua (Conagua) comenzó el proceso de devolución de la icónica Torre de Pemex, en el malecón de Veracruz, a Petróleos Mexicanos. Pablo Robles Barajas, director general de la región Cuenca-Golfo-Centro de la Conagua, informó que el proceso de devolución comenzó hace un mes, debido a que el edificio no fue ocupado. Reconoció que su mantenimiento es muy costoso y, aunque está estructuralmente sólido, presenta deterioro y requiere una inversión considerable para su rehabilitación. Externó: “Estuvo a cargo de Conagua. Ya no. […] El edificio sigue siendo de Pemex, estaba a préstamo, y ya se le está devolviendo”. La Torre Pemex fue considerada durante la pasada administración federal como sede de la descentralización de Conagua, en cumplimiento de la política impulsada por el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, el traslado nunca se concretó. Aunque algunas oficinas operaron temporalmente en el inmueble, la falta de condiciones adecuadas —como espacio suficiente y estacionamiento— impidió su ocupación plena. La torre, con 54 metros de altura y 13 pisos, es una pieza arquitectónica clave del puerto jarocho. Fue construida por orden del expresidente Miguel Alemán Valdés, con un estilo Art Déco tardío, y funcionó inicialmente como sede del Banco de México antes de ser ocupada por Pemex en 1980. En 2023, Conagua inició su ocupación, moviendo a cerca de 30 empleados. A pesar de las adecuaciones que se iniciaron en la torre para recibir a unos 1,400 empleados de Conagua, la reubicación total nunca se completó. Robles Barajas, citó diversos factores para la interrupción del proyecto, incluyendo las "travesuras" de los vientos del norte. Esta situación llevó a la decisión de devolver la propiedad a Pemex, una entidad con la infraestructura para cuidar adecuadamente la estructura. “Se comenzaron a hacer unas obras. Se suspendió el traslado de oficinas centrales. Los nortes hicieron sus travesuras. Por eso nos interesó devolverlo a Pemex para que se cuide un edificio tan importante porque por su antigüedad necesita mucho mantenimiento”, destacó el director general de la Conagua Cuenca Golfo-Centro. Actualmente, personal de Petróleos Mexicanos ha visitado el inmueble para evaluar su estado. La restitución a Pemex asegura que el edificio, que incluso cuenta con una bóveda de su época como banco, reciba el cuidado necesario para su conservación. La Conagua, por su parte, ya cuenta con una presencia significativa a nivel nacional, por lo que la mudanza masiva de sus oficinas centrales no es una prioridad. Este edificio, construido en la década de 1950 bajo el diseño del arquitecto Carlos Lazo Barreiro, representa un hito del art déco tardío en el Golfo de México. Su devolución marca el cierre de un capítulo administrativo-gubernamental que no llegó a consolidarse. |
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