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La Jornada
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Ciudad de México.- El gobierno federal cumplirá las medidas cautelares dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH),para garantizar la seguridad y tranquilidad de los integrantes de la comunidad jesuita en Cerocahui, en la región de la Tarahumara, sostuvo Alejandro Encinas Rodríguez, sub secretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación.
En Chihuahua, informó a través de sus redes sociales, “instalamos con la gobernadora de estado, María Eugenia Campos, la mesa de implementación de medidas cautelares -MC 876 22- dictadas por la @CIDH a once integrantes de la comunidad jesuita de Cerocahui, Tarahumara, municipio de Urique, Chihuahua.
“A nombre del @GobiernoMX refrendamos el compromiso para cumplir con las medidas cautelares y garantizar la seguridad y la tranquilidad de las comunidades en esta región”.
Las medidas cautelares se aplicarán las personas de las comunidad jesuita que se considera se encuentran en una situación de riego, grave y urgente. Entre los beneficiarios se encuentran tres religiosas y nueve sacerdotes quienes han exigido justicia por los asesinatos de los sacerdotes Javier Campos y Joaquín Mora, junto al guía de turistas Pedro Palma y el joven Paul Berrelleza, ocurrido el 20 de junio de 2022.
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