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Xalapa, Ver.-
No se hagan bolas. Si bien a su paso por la Secretaría de Salud dejó una cauda de irregularidades y corruptelas, como la existencia de 884 mil medicamentos oncológicos próximos a caducar y que no se entregaron a hospitales públicos, además de contratos para obras en hospitales sin licitación pública, entre otros, lo cierto es que la salida de Roberto Ramos Alor como titular del ramo no obedece a esas anomalías, como algunos suponen, sino a que decidió seguir sirviendo a Rocío Nahle desde Coatzacoalcos, donde espera convertirse en diputado local o Federal en el 2024, aun cuando su renuncia coincidió con el informe, días antes, del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) sobre los resultados de la auditoría realizada a la Secretaría de Salud de Veracruz (SSA), donde se determinó la existencia de 884 mil medicamentos oncológicos próximos a caducar y que no se entregaron a hospitales públicos, lo que ha provocado un sentimiento de indignación y de mucha frustración, “porque se batalla mucho a veces para conseguir un medicamento, algún tipo de insumo", según el sentir de la activista Monserrat González, quien fuera presidenta de la asociación Casa de Amor para Niños con Cáncer, con sede en Coatzacoalcos. El tema, sin embargo, no es algo que conmueva a Ramos Alor ni nunca lo ha conmovido, sino que el hombre que llegó a Salud empujado por Rocío Nahle se regresa al sur del Estado desde donde seguirá haciendo labor proselitista a favor de la Secretaria de Energía que no quita el dedo del renglón en eso de convertirse en Gobernadora de Veracruz en el 2024. Y es que en Veracruz no manda García Jiménez sino que, desde ahora, impone su voluntad Nahle García. Hace poco Sandra Paola Arellano Cruz, subdirectora de Planeación de Suministro de Medicamentos y Material de Curación del Insabi refirió que después de 44 sesiones semanales entre funcionarios del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) y padres de niños con cáncer, llegaron a la conclusión de que aún persisten deficiencias administrativas en el Hospital de Alta Especialidad de Veracruz, algo que habría sido suficiente para llamar a cuenta al inefable Ramos Alor. La funcionaria Federal reveló que en una visita realizada a ese nosocomio y al almacén central de Xalapa, se encontraron diversas irregularidades, entre otras, que el almacén de medicamentos está rebasado en su capacidad, mientras en el hospital se reporta desabasto de 139 claves pero no es todo: al hacer un rastreo de claves de medicamentos oncológicos se encontró que de etopósido y cisplatino no hay coincidencia en el inventario electrónico con las piezas en físico, por lo que en el almacén se identificaron cerca de 900 mil piezas que caducarán en los siguientes nueve meses, de tal suerte que se requieren realizar “ajustes para aprovecharlos”. En tanto, en la farmacia del HAEV, la funcionaria comentó que también funciona como almacén, farmacia ambulatoria y farmacia del hospital, por lo que presenta saturación y carece de controles de calidad, como termómetros o termohigrómetros para medición de temperatura y humedad, en pocas palabras, Salud Estatal era un verdadero desgarriate. A la versión de la funcionaria se unió la del Coordinador de Especialidades Médicas, Avelino Guardado Sánchez, quien reconoció que hacen falta espacios para el almacenamiento y conservación de los medicamentos, y aunque dijo que trabajan en la solución, y hasta presentó un reporte de avances en la remodelación y mantenimiento correctivo de equipos y mobiliario en la torre pediátrica, cuyo deterioro y mal funcionamiento fue denunciado por los padres de familia, falta mucho por hacer debido a escases de dinero que el Gobierno del Estado se rehúsa a aplicar. Pero con todo y ello, Alor fue salvado por su amiga Rocio Nahle que ahora le abrirá las puertas de la política para que pudiera estar en condiciones de competir en el 2024 por una diputación local o Federal, aunque uno de pregunta: ¿habrá alguien que vote por semejante personaje que siempre puso en riesgo la salud de los niños con cáncer?. Si, los morenos a cambio de unas monedas.
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