.- Negociadores del Congreso estadunidense intercambiaron el viernes ofertas y trataron de llegar a un acuerdo sobre seguridad fronteriza que evite un nuevo cierre de gobierno y poner fin a una confrontación con el presidente Donald Trump, que ha dominado las primeras semanas de un gobierno dividido.
Los negociadores estaban optimistas de poder llegar pronto a un acuerdo sobre un paquete de gastos para barreras físicas en la frontera con México y otras medidas de seguridad. Dijeron que el acuerdo prácticamente estaría muy por debajo de los 5 mil 700 millones que el presidente Donald Trump ha pedido para el muro que quiere construir en la frontera y que se acercaría más a los mil 600 millones que fueron propuestos el año pasado a través de una iniciativa bipartidista del Senado.
"Eso es en lo que estamos trabajando", dijo la representante Lucille Roybal-Allard, demócrata por Los Ángeles, una de las negociadoras.
Aparte de los montos, las negociaciones se enfocaban en el tipo y ubicación de las barreras, dijeron los participantes. También estaban en juego la cantidad de camas que podría tener el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas para inmigrantes detenidos, y el total de fondos que se asignaría para desastres naturales.
También se prevé que se incluyan fondos para equipo de monitoreo de alta tecnología y más personal.
Nadie descarta que pueda haber problemas de último minuto, especialmente dada la inclinación de Trump por cambiar de opinión en cualquier momento, pero los ánimos se inclinaban claramente hacia lograr un acuerdo que el Congreso pueda aprobar el viernes próximo. Si no se logra un acuerdo, muchas agencias del gobierno tendrían que cerrar de nuevo al día siguiente por falta de fondos.
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