Nada más porque Bolivia no tiene playas; pero dadas las circunstancias, bien podría decirse que la $anta Inquisición desembarcó de nueva cuenta en esas altas tierras, llevando en la empuñadura de las espadas a su patético crucifijo, haciendo una apología de la tortura, la injusticia, la ceguera y finalmente la estulticia del ser humano…
Curioso ente capaz de creer a pié juntillas cualquier tipo de absurdeces; y hasta dar la vida por ellas. O lo todavía mucho peor: matar en nombre de sus creencias…
Visto así desde lejos, nos asombra y hasta irrita que los seguidores de Alá y su profeta Mahoma (571 - 632) sean misóginos. Las obligan hasta que vistan igual; y eso de “igualdad de género” lo consideran de mal gusto…
Pero no se sabe de malos tratos ni que haya feminicidios, como los que a diario ocurren por estos lados. Es en cierta manera una disfrazada forma de esclavitud. Cierto…
Pero no se asombran; y en su defecto hasta festejan, el que “Dios ha regresado al Palacio Quemado”, como espetó el millonario Luis Fernando Camacho cuando de rodillas puso la Biblia sobre la bandera de su Patria y le dio las gracias a Dios…
Lo que lleva al evidente simbolismo de que para él, Dios está por encima de la Nación y sus Leyes. Y si a eso se agrega que Jeanine Áñez se le adelantó; pues cuando él ya se hacía sentado en la Presidencia, la dama le dio feo madruguete -pero bien merecido-…
Porque “El que a hierro mata, a hierro muere”; y él a su vez ya había desplazado al ex presidente Carlos Diego de Mesa Gilbert, que fue quien hizo la campaña en la que perdió, pero tenía los contactos para mover gente y alegar fraude…
El mismo que ahora trata de resurgir pidiéndole al Gobierno de México que respete su tradición histórica y no le permita a Evo Morales que continúe haciendo política de confrontación. Lo que sinceramente está completamente fuera de sentido; pero todo sea por atraer los reflectores…
El caso es que protestar sobre la Biblia el cargo de Presidente, que fue lo que hizo doña Jeanine; e invocar también a Dios en sus declaraciones, no presagia nada bueno. Porque lo que mal empieza, todos sabemos que mal acaba -más o menos como el operativo de Culiacán-…
Pero es un buen punto para remachar que las mujeres son maravillosas en casi todos los sentidos -siempre acordes con La Luna, desde luego- sin embargo tienen el grandísimo defecto de que se creen todo lo que les dicen…
Con decirles que son fervientes creyentes en un Dios al que nunca jamás nadie ha visto y además está representado en este mundo de angustias y sufrimientos, por patéticos entes misóginos y pederastas…
Sin embargo, son tan encantadoramente contradictorias -o contradictoriamente encantadoras, como se prefiera- que al mismo tiempo de ser tan crédulas, es casi imposible engañarlas…
Son buenísimas para detectar cuando alguien miente -o será que los hombres somos muy brutos para mentir- pero las mujeres policías son mucho mejores que los hombre -o peores; sus creencias las pierden-…
Y cabe aquí citar al inmenso Francois-Marie Arouet (1694 – 1778) más conocido como Voltaire. “Nada puede ser más contrario a la religión y al clero, que la razón y el sentido común”.
Cambiando de tema…
El que hayan liberado sanos y salvos a Alejandro Vera Jiménez, ex rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, y a su señora esposa María Elena Ávila Romero, mediante un operativo en el que fueron detenidos los presuntos responsables…
Es una noticia que debe de celebrarse en grande por todos; pues hay dos razones. La primera.- Porque la apreciable pareja son gente de bien y apreciados por la sociedad…
Y la segunda.- Porque habiendo sido secuestrados apenas el miércoles, en menos de 48 horas se resolvió el caso. Lo que quiere decir que las policías son eficaces y si saben como hacer su trabajo; solo hay que tener buenas relaciones y tener localizados a los delincuentes; …
Como desde hace mucho deben de tenerlos; porque de otra manera no se explica que la UIF de Salvador Nieto haya intervenido las cuentas de cientos de narcotraficantes por casi mil millones de pesos…
La pregunta es: por qué no lo hicieron antes si ya sabían quienes eran. Aunque la repuesta es obvia: porque no les convenía.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
No sin recordarles que Air Bit Club es un fraude.
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