¿Habrá alguien que crea que los extranjeros creen en nuestro gobierno como “nuestro” y deciden aplicar capital para impulsar actividades productivas? La realidad es que no creen que nuestro gobierno sea “nuestro”, es un grupo de economistas educados en sus universidades y que están respondiendo a los imperativos que bien mamaron, saben que el capital, el gran capital de Wall Street, rinde en su país un 3-8%, el atractivo de su vecino México que paga hasta lo increíble, llegando el rendimiento de algunos bancos o financieras al 50 % del capital aplicado; les es sumamente codiciado, pero no creen en nuestros banqueros para recibir la información oportuna, para poder jugar amarrado, pactan con los funcionarios que sembraron en el gobierno, celebran leoninos contratos en que el gobierno garantiza con su mayor riqueza, el petróleo, compran además los bancos y asunto concluido. Capital de Wall Street en dólares se hace golondrino en pesos y hace verano en México con rendimientos altísimos, compran los bancos y se adueñan de las garantías de los deudores de la antigua banca privatizada, ya dueños de la banca y cerca de la información privilegiada que manejan las instituciones financieras, saben cuándo retirar capital y utilidades, convertirlas en dólares y regreso a casita sin los molestos sobresaltos del de comprar tesobonos, con incierta o aleatoria recuperación. Inteligentísimos los piratas especuladores extranjeros, como les gusta apostar y jugar en la bolsa, compran el casino con todo y los croupiers. Con lo que no cuentan es que junto con el gran casino “México”, tienen que cargar con los mexicanos y si ellos son herederos de la pérfida Albión, nosotros lo somos de los ladinos aztecas, zapotecas y otras etnias que nos heredaron además de lo ladino y muchas mañas, el orgullo de casta indomable, que no piensen que la llevan fácil. Vecino gringo, Remember Corea, Remember Viet-Nam, remembre Cuba, someter a un pueblo por la fuerza de las armas o de los dólares, no es vencerlo; México puede ser amigo, aliado o socio, no vasallo.
La Nación está expectante, más de un 60% otorgo su voto al tabasqueño Veracruzano, habló en campaña con muchas promesas, ahora, el mismo manifiesta que debe cambiar la forma y fondo en sus declaraciones, ya es el mandatario y tiene a los mexicanos convencidos de que la hará bien, por supuesto, hay misterio, la jauría de que se rodea ya ladra y busca acomodo; AMLO deberá recordar que al igual que los gringos, en los negocios no hay palabra de honor que valga, se buscan pesos, y los funcionarios de AMLO con salario reducido, con seguridad buscarán alianzas para sacar un poco más, afirman que el poder es creado para que los poderosos vivan bien, no con salario miserable de obreros. Que seguirá? ¡AGUAS! Octuble 1 del 2018 lmwolf@prerodigy.net.mx Luis Martinez Wolf |
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