Los viejos tiempos, aquellos hoy casi olvidados, cuando el Partido Revolucionario Institucional ganaba en las elecciones de todas, todas, el pueblo repetía una popular sentencia que disponía “ Hay tres clases de pendejos, los que apuestan a la lotería, los que siembran de temporal y los que juegan contra el PRI”, muy acertada la sentencia pues tuvo vigencia durante más de setenta años, en parte aún tiene vigencia en un 66 %, más la tercera, Jugar contra el PRI se desangeló, desapareció del panorama político el PRI, primero por el carisma de un zorro que en el 2000, jugando por el PAN demostró que se podía vencer al PRI, repitió el PAN en el 2006 venciendo a otro tigre que jugó contra el PRIAN, 12 años de panismo desencantaron a los electores que en el 2012 causaron el retorno del PRI a los altos mandos.
Todo parecía indicar que el PRI retornaba triunfador, fueron pendejos, pues el necio que había perdido en el 2006 y el 2012 insistió en el 2018, con su equipo de MORENA, un partido nuevo con muchos viejos muy espueleados, no ganó, arrasó en las urnas logrando una increíble votación, pero el necio líder no venció solo, se apodero MORENA de muchos Estados ganando la gubernatura y venciendo en la elección de diputados federales y estatales, así como senadores, algo que aunque los mexicanos esperábamos, nunca a los niveles a que el efecto PEJE, logro imponer a su grupo seleccionado; lo que tenemos hoy como futuros gobernantes, provocará una situación que nadie sabe su camino, las promesas de campaña son extraordinarias, con que se cumpla una parte la llevaremos de primera, México será otro, otro mejor que el que hemos malvivido. Pero…
El ya electo Presidente de la Republica se manifestó en campaña como un hombre no afecto a las bajas pasiones, sin ambages declaró que impondría en su gobierno una política de acercamiento con los contrarios en la campaña electoral, se comportaría sin prejuicios que le llevaran a barrer para atrás, nada de eso, mucha buena vibra para acercar a políticos de todo tipo, tan lejos ha ido en sus promesas, que pretende aplicar sistema semejante al que intentaron aplicar los colombianos, perdonando a los guerrilleros, muchos de ellos dedicados al cultivo y tráfico de drogas, AMLO perdonara ofensas y ya está acercando a su regazo a personajes de dudosa reputación y al expresar de dudosa es, porque los mexicanos no sabemos cómo calificar a los políticos a los que brinda amor AMLO, unos son pillos, otros asesinos y casi todos los que perdonará AMLO unos perfectos jijos de la,,,santa sede.
En política se acostumbra atraer a los enemigos, tenerlos cerca les permite saber cómo andan y que pretenden, los personajes a quienes AMLO brinda amor, están perfectamente reconocidos, pero lo que saben, bueno o malo, puede ser aprovechado para gobernar sin tener que andarse defendiendo de los enemigos, francos y los encapuchados. Nada pendejo quien decide, no sabemos qué pasará, esperemos tenga presente el apotegma de la edad media, cuando los señores feudales aplicaban la norma: “Ense et eratro” lanza y arado, la lanza para defenderse o atacar y el arado para producir abundantes alimentos y tener tranquilo al pueblo. ”AGUAS” Agosto10 del 2018 lmwolf@prodigy.net.mx Luis Martinez Wolf |
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