Durante varios sexenios, muchos años, más de cincuenta, los mexicanos “hemos” aprendido la fórmula para estar en primera posición dentro de la revista Forbes, esa que da la clasificación de los millonetas y que a decir verdad sirve para mostrar al mundo que solo mediante las malas artes, los empresarios pueden acceder a las páginas de Forbes, sentir el placer de ser parte del TOP-TEN implica aceptar la sacrosanta tesis: “NEGOCIOS SUCIOS, GRANDES FORTUNAS”. Es todo.
Ningún ser humano en su sano juicio, puede aceptar que pueda darse la genialidad de un corredor de bolsa, en los ámbitos bursátiles mexicanos, pueda pasar de ser un exitoso gestor bursátil, a ser poseedor de una escandalosa fortuna, en México es posible, solo es necesario tener la suerte de estar cerca del Presidente de la República en turno, saber algo del juego bursátil…y ya. Un distinguido mexicano con raíces orientales como Carlos Slim, manejaba en la bolsa algunos buenos negocios, buenos en un mercado bursátil pinche como es el mexicano, en esos menesteres se codeo con Carlos Salinas, Presidente, emperador de México por seis años y ¡YA!. El distinguido Mexico-Libanés, armenio, Sirio o Turco, cambió su status de exitoso corredor bursátil mexicano, pasando a ser el hombre más rico del mundo.
¿Dónde carajos andamos los mexicanos?, ¿Qué demontres significa tener mas del 50% de los habitantes de este surrealista país, en la miseria absoluta? y al mismo tiempo alojar en su territorio a un fulano que dice poseer más de 70,000 millones de Dólares como fortuna personal. Peor aún, hay varios como Carlos Slim.
En nuestro fiel estado de Veracruz las cosas no pintan mal, somos un Estado líder en ganadería, en varios productos agropecuarios, una potencia en hidrocarburos fósiles, recibimos el 35 % de los escurrimientos de agua, tenemos tres de los grandes puertos marítimos más importantes del país, establecidos en un litoral de 750 Kmts., con todo eso tenemos uno de los más altos índices de miseria, hemos sido invadidos por extranjeros que discriminan a los veracruzanos, no hay pesca, marina mercante ni agricultores prósperos. Veracruz es antonomasia de miseria y entrega.
El idiota alegato, debate, o vacilada respecto al petróleo, ha rebasado los limites de la tolerancia del pueblo, el constitucionalista Carranca y Rivas no se midió cuando en una ocasión habló ante el Congreso, expuso, exhibió, nos restregó en la cara, el carácter pusilánime de quienes están en espera de una solución nacionalista respecto al asunto petrolero. Sin tapujos, exigió juicio político para el C. Presidente de la República, acusándole de perjurio en asuntos de capital importancia.
Cualquier experto en asuntos petroleros sabe lo fácil que es el negocio, tanto desde su perspectiva técnica como financiera, en todo el mundo donde hay petróleo, los naturales se han enriquecido, ahora debe tocarle a México, AMLO tiene mucho hablando de Petróleo, parece conoce el negocio, si logra una mínima parte de lo que promete, México está salvado, bueno, siempre y cuando las ganancias se bien inviertan. ¡AGUAS!
Julio 22 del 2018 lmwolf@prodigy.net.mx Luís Martínez Wolf |
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