LA EXIGENCIA fue contundente: la candidatura a la diputación Federal por Huatusco para Mario Tejeda Tejeda, o la organización Vía Veracruzana escucharía otras propuestas. No hubo acuerdos aun cuando ese distrito se encuentra, tácitamente, perdido para el “tricolor”, a tal grado que la inicial candidata Martha Utrera Ortega, exalcaldesa de Soledad de Doblado –quien, por cierto, heredó el ayuntamiento a su hija, Ximena Rodríguez Utrera, lo que se ha convertido en una práctica panista-, decidió renunciar y en su lugar fue habilitada Ana Rosa Valdez, ex munícipe de Paso de Ovejas, lo que molestó sobremanera a los llamados “Viagros”, según nos cuenta un personaje cercano a aquellos hechos. Pero eso no fue la gota que derramó el vaso: Amadeo Flores Villalba, amigo de siempre de Miguel Ángel Yunes Márquez, tenía tiempo convenciendo a su padre de abandonar al PRI tocándole el amor propio: -te negaron la posibilidad de ser candidato a Senador que por derecho político te correspondía-, dicen que le repetía una y otra vez, haciéndole ver que tenía mejores perspectivas que Juan Nicolás Callejas Roldán, y qué decir de la aspirante mujer María del Carmen Pinete Vargas. Fue tanta la insistencia del junior –orgullo del nepotismo del hombre de Cotaxtla-, que este último decidió echar por la borda toda una vida afiliado al PRI, por cuya instancia ocupó los cargos de Director General de Desarrollo Agrario en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Sedatu; Procurador General de Justicia del Estado –por cuyo cargo algunos colectivos están demandando su cabeza para que sea vinculado a proceso por presunta desaparición forzada-; Diputado Federal, Secretario General de Gobierno, Diputado local, dirigente estatal del PRI y precandidato a la gubernatura. Y todo ello, como decía Arturo de Córdoba, no tuvo la menor importancia para quien se hacía llamar: Amadeo para los amigos, “Amadreo” para la oposición.
FLORES ESPINOSA fue, finalmente, convencido por Amadeo Flores Villalba de abandonar la casa que le dio todo, cuando le deslizó la promesa que le hiciera el candidato de la coalición “Por Veracruz al Frente” a la gubernatura, Miguel Ángel Yunes Márquez, de que si gana la elección de Julio lo hará, ni más ni menos que Presidente del Tribunal Superior de Justicia, en sustitución del sureño Edel Álvarez Peña, amigo cercano del padre del abanderado. Y uno se pregunta: ¿y si no gana los comicios el hijo del gobernante en turno, qué pasará con el joven Flores Villalba? Porque algo queda claro: ni Cuitláhuac García Jiménez y, mucho menos, José Francisco Yunes Zorrilla, le permitirían un espacio notable si saliera uno u otro victorioso, este último menos tras la traición tan villana (villana, no Villalba que quede claro) operada a partir de ambiciones personales y de grupo.
PEOR AÚN, cabe preguntar si Miguel Ángel Yunes Linares se sumergirá en el ostracismo en caso de ganar su hijo Miguel Ángel Yunes Márquez, y en ese tenor se retiraría a la vida privada. Porque al paso que se observa, se ve difícil que Ricardo Anaya Cortés gane la elección presidencial, lo que dejaría huérfano al oriundo de Soledad de Doblado, aunque otro gallo le cantaría si, finalmente, se impone el queretano con quien mantiene una relación cercana. Y es que Andrés Manuel López Obrador ya dejó en claro desde la Huasteca Veracruzana que si gana la Presidencia de la República no trataría con Yunes Márquez (léase “chiquiyunes) en caso de que el panista se imponga el próximo primero de Julio, lo que ya constituye una amenaza para Veracruz partiendo de la vieja conseja de que “si al gobernador le va bien en el centro, le irá bien al Estado que gobierna, pero si le va mal, que Dios nos agarre confesados”. Por ello la postura del tabasqueño provocó que la joven señora Patricia Lobeira Rodríguez, esposa de Yunes Márquez sacara la casta y vía Facebook encarara a AMLO, lo que no hicieron los dirigentes estatales del PAN, Jesús Mancha Alarcón; del PRD, Jesús Velázquez Flores, ni del MC, Sergio Gil Rullán, silencio que, a decir verdad se vio medroso.
EN ESE sentido, a la postura de López Obrador de que no se puede permitir que en Veracruz el padre herede la gubernatura al hijo ya que los veracruzanos seríamos el hazmerreír del País, la señora Lobeira de Márquez –que demostró tener más pantalones que los líderes partidistas que dicen apoyar a su marido-, anotó en su cuenta de Facebook: “En su comentario –dirigiéndose a AMLO- podemos ver reflejado características de su carácter, por un lado, su soberbia, que ya se ve como presidente, y por otro, su autoritarismo y poca tolerancia", y remató –no ausente de razón-: “son rasgos que estamos viendo desde el inicio de la carrera de este señor y qué tristeza que muchos se hacen los de la vista gorda pensando que una vez que llegue cambiará, y les tengo una sorpresa, la presidencia solamente te revela, expone más quién eres, no te cambia”. AMLO –enfatizó- “Incita al voto del enojo lo cual no es muy difícil de lograr en este país, sin embargo, un país no se gobierna con el estómago, se gobierna con la cabeza”. Duro y a la testa, dirían en la aldea, pero con una determinación que habla bien de la señora, ya que si no somos capaces de defender a la familia, simple y llanamente, no somos nada.
RESPECTO AL ex Procurador Flores Espinosa, que ya ve a su hijo como Presidente del inmediato Tribunal Superior de Justicia y él (Amadreo para la oposición) ¿por qué no?, como futuro Secretario de Seguridad Pública o Director de Notarías y Registro Público de la propiedad, las cosas podrían complicarse, sobre todo a partir de que Jorge Verástegui González, especialista en Derecho y temas de búsqueda de desaparecidos abrió la esperanza a los colectivos que buscan a sus hijos, al dejar en claro que se puede acusar de obstrucción al Gobierno del Estado y los colectivos pueden proceder en su contra, si no se procede penalmente contra ex funcionarios por temas de desaparición forzada –como lo ha insistido “Solecito” en relación a Flores Espinosa o el propio ex gobernador Javier Duarte de Ochoa-. Verástegui insiste en que “la participación fundamental de las víctimas de estos delitos y familiares de desaparecidos es importante porque en la medida de que se esté llevando un proceso penal contra esos ex funcionarios y se descarte una acusación contra el ex gobernador, las familias podrán imputar responsabilidad, también, a la Fiscalía y decir que hay responsabilidad contra ésta al haber una omisión". Y uno se pregunta: ¿Amadeo Flores Villalba como futuro presidente del TSJE estaría dispuesto a actuar contra su padre si los colectivos insisten en llevarlo a proceso o, estaríamos ante un asunto de flagrante impunidad? Por lo pronto ya se giró orden de aprehensión en contra del ex Fiscal Luis Ángel Bravo Contreras con todo y recompensa de hasta 5 millones de pesos por informes que lleven a su captura. Y uno se pregunta: ¿se hará lo mismo contra Reynaldo Escobar y Amadeo Flores? A ver qué pasa. Vaya caso para el Junior. OPINA carjesus30@hotmail.com
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